Todas las historias tienen un principio y un final, en el caso de los superhéroes el principio suele ser trágico y el final es un misterio. Spiderman nos enseñó que un gran poder conlleva una gran responsabilidad, ¿pero qué aprendimos de Batman?. ¿Es un salvador incomprendido y perseguido, un alma torturada luchando contra el mal o un niño rico con demasiados juguetes?.
El siempre fue diferente, lejos de llevar la doble vida de todos los héroes, Bruce Wayne vive por y para Batman, los problemas de Gotham son los suyos y la oscuridad de esta ciudad amenaza con tragarlo.
El caballero oscuro: la leyenda renace recupera la historia donde la dejó, el Joker (magistral e inolvidable interpretación de Heath Ledger) acabó con los seres queridos de Bruce Wayne (Christian Bale) y Batman tuvo que desaparecer y sacrificar su reputación para conservar la paz en Gotham. Una mentira que les obligó a el y al Comisario Gordon (Gary Oldman) a cambiar sus vidas.
Han pasado ocho años desde que la oscuridad se tragara al héroe y a Bruce las cosas no le van demasiado bien, lisiado, escondido del mundo y con el corazón roto se resiste a tomar las riendas de su vida. Gotham, sin embargo, parece vivir su mejor momento sin su ayuda, los delincuentes están en la cárcel gracias a la dura Ley Dent, las calles son más seguras y ya nadie recuerda ni necesita a Batman.
La llegada de una felina ladrona (Anne Hathaway) y de Bane (Tom Hardy) un nuevo enemigo con aires de revolucionario (que sería mucho mejor villano con una voz diferente), obligarán a Wayne a salir de su letargo y despertar al caballero oscuro. El largo camino, interior y exterior, para devolver la fuerza y la valentía a un héroe que ya no cree en nada. Algunos acusan a la película de hacer propaganda de derechas, pero hay mucho más escondido dentro de esta historia. Habla del miedo, el miedo que llena todo y condiciona nuestras vidas, te paraliza y te somete.
También habla de las injusticias, la eterna desigualdad entre ricos y pobres y sobre todo, es la prueba de que el poder, esté en un lado o en otro, corrompe. Nuevas armas, vehículos y personajes para crear la historia más profunda de Batman, Christopher Nolan ha sido capaz de mostrar el alma, la soledad y la frustración que esconden las grandes historias de héroes. Marcada para siempre por los trágicos sucesos de su estreno, la historia se vuelve más oscura que nunca.
Es difícil poner punto y final, y mucho más contentar a todos, pero la última enseñanza que nos deja el caballero oscuro es que no debemos conformarnos, ni seguir a unos a otros sin cuestionar nuestras decisiones. Cualquiera puede ser un héroe, luchemos por el futuro, porque Batman no va a estar siempre para salvarnos.